Trabaja de manera muy eficaz en las zonas que queremos tratar produciendo un efecto termodinámico que destruye el tejido graso y el organismo se encarga de eliminarlo de manera natural y gradual.

Actúa en 3 profundidades con el fin de alcanzar la capa dérmica. Allí abunda el colágeno, trabaja la dermis más profunda y llega a las zonas que se encargan de las contracciones musculares.

Trata de manera muy eficaz la flacidez en la zona del óvalo facial y del cuello. Redensifica el tejido y estimula la creación de colágeno y elastina.

Perfecto para aquellas personas que no tienen mucho tiempo ya que las sesiones pautadas son cada 45 días.Tiene un efecto remodelante, elimina la grasa localizada y estiliza con gran precisión. Además trabaja todos los tipos de grasas (edematosa y fibrosa).

Su eficacia se consigue obteniendo un aumento de la temperatura de aproximadamente 65º  a 75º C en la capa SMAS (Superficial Sistema Aponeurótico Muscular) por medio de los Ultrasonidos de Alta intensidad. La zona localizada en el punto focal entra en reacción de coagulación, y por lo tanto generará formas de tracción fuerza centrada en el punto de coagulación y estimulara el colágeno para reestructurar el tejido.

En definitiva, a raíz de los efectos generados por el HIFU, la piel inicia una respuesta de cicatrización de la herida, lo que resulta en la formación de nuevo colágeno. El nuevo colágeno se compacta gradualmente desde la zona más profunda (el interior) hasta la zona superficial restaurando la elasticidad y tersura de la piel, con el fin de lograr el efecto de disipar las arrugas (Antiaging) tanto en hombres como en mujeres.

Centra la energía ultrasónica por debajo de la superficie de la piel para estimular la creación de nuevo colágeno mediante el calor con líneas de 25mm de longitud y hasta 20 puntos de coagulación térmica. Como resultado, la piel comenzará elevarse y tonificarse durante las semanas siguientes al tratamiento.

La aplicación HIFU alcanza temperaturas localizadas de hasta 75º C mientras que otros tratamientos similares como la radiofrecuencia, el láser o IPL solo llegan hasta los 50ºC, por lo que no alcanzan la misma profundidad.

Este tratamiento de ultrasonidos permite llegar a la capa SMAS, donde se conecta la dermis con los músculos faciales, sin necesidad de cirugías o interrupciones en la piel. Esta es la zona a la que se suele dirigir un cirujano plástico para reducir la flacidez en la papada, las mejillas y el cuello.

La energía se aplica en puntos de coagulación térmica para alcanzar zonas y profundidades concretas, a diferencia de otros tratamientos faciales que reparten la energía en una zona amplia que no llegan a los 3mm de profundidad. HIFU consigue llegar hasta los 4’5 mm de profundidad.

Esta tecnología estimula la creación en la piel de nuevo colágeno y elastina. Como resultado, hace que la piel se estire y las arrugas se rellenen con el nuevo colágeno de forma natural, este efecto no es inmediato, los resultados empieza a aparecer progresivamente durante los 3 meses siguientes.

• Alteraciones de la coagulación.
• Enfermedades del tejido conectivo y neuromuscular.
• Personas con enfermedades mentales de alta sensibilidad (depresión, ansiedad severa, nerviosismo, esquizofrenia, epilepsia, etc).
• Pacientes con fiebre alta.
• Haber consumido alcohol pocas horas antes del tratamiento.
• Personas con cardiopatías graves, marcapasos, desfibriladores o cardioversores.
• Personas con implantes como botox, ácido, rellenos, hilos tensores, ect.
• Infecciones graves o heridas abiertas.
• Pacientes con acné severo.
• Cáncer.
• Pacientes con sobrepeso importante.
• Personas con implantes metálicos.